¡Ay, el tiempo! Ese generador de ansiedades que pueden desembocar en depresión.
No me haga mucho caso, pues el tiempo no es el provocador.
Realice el siguiente experimento:
La primera condición es estar relajado y no tener absolutamente nada que hacer.
Cuando esté en ese estado, imagine varias situaciones que considere muy importante para usted (pongamos unas tres); y la condición fundamental es que las tres las tiene que realizar ahora mismo; si deja una sin hacer su fin es inevitable.
Probablemente la mente empiece a divagar, pero si lo consigue observará como la tensión empieza a apoderarse de usted (depende de lo sugestivo que sea) y el estado ansioso está asegurado.
Por lo tanto existe un tipo de tensión que nos la creamos nosotros por no saber organizarnos.
Leí hace poco una cita que me encantó: "Haz una cosa cada vez".
Ésta es una de las acciones más prácticas para conseguir alejar de nosotros este tipo de ansiedad. Para ello, tenemos que aprender a priorizar.
Pero ésto ya es otro tema.
Fdo.: Un ignorante
3 comentarios:
A mi por desgracia me entra la ansiedad con facilidad, así que mejor no hacer ese experimento.
Buena frase esa de "haz una cosa cada vez", el caso es aplicarla. Y lo de priorizar, no podrá estar más de acuerdo :)
Me ha gustado mucho tu entrada, la apoyo 100% :)
Saudos Jose Luis!
Gracias por el comentario C.A.
Creo que la ansiedad está muy relacionada con la impaciencia; es decir, ésto lo quiero hacer ya y ahora. Nuestro "niño/a interior" se pone caprichoso y aquí viene el problema.
Por eso, es bastante aconsejable practicar la paciencia. Y "al niño/a interior le debe dar respuesta el adulto que vamos formando.
Saludos.
Hola, Juan José, vine a retribuirte la vista y me encontré con un blog de lo más interesante. Gran reflexión la del tiempo, principalmente para esta época de apuradas y corridas.
Voy a seguirte.
Un gran abrazo.
Humberto.
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