PARA USTEDES LA "PERRA GORDA"

Hace más de 4 años. Esperad que lo vaya a consultar en la wikipedia… (sobre el año 1600). Confirmado, hace más de 4 años vivió por Italia un tal Galileo Galilei, de los Galilei de toda la vida.

Muchas personas tienen manías: unas coleccionan cacharros inservibles, otras sellos, otras monedas, a unas les da por estudiar monos..., pues a ésta le dio, entre otras cosas, por mirar al cielo y contemplar el movimiento de los astros.

En aquella época se afirmaba que el Sol giraba en torno a la Tierra.

Bueno, pues a este buen señor no se lo ocurrió otra cosa, que deducir que no era el Sol el que se movía, sino la Tierra.
Como le dijeron los amigotes: y si eso es así ¿Cómo es que no nos mareamos? Y llevan razón pues yo me monto en cualquier noria de feria y echo hasta la última papilla; por lo tanto, si la Tierra estuviera moviendose estaría “gomitando” todo el tiempo.

Total, tan pesado se puso con su ideita que al final tuvo que intervenir el “Santo Oficio”. Éstos no se andaban con chiquitas, o se les hacía caso o te mandaban para el otro barrio rápidamente que para eso tenían unas herramientas, que rieté tú de las de los asesinos de las teleseries. Y por esa rapidez de mandar al personal para el más allá, supongo que se le puso lo de “Santo Oficio” Santo= relacionado con el más allá, Oficio=eficacia, rapidez.

Cuando al Sr. Galileo (porque ya tenía sus añitos) me lo cogieron de las orejitas y le dijeron: “Te retractas de lo que dices; es decir, que lo que cuentas es mentira, o te vamos a poner calentito el cuerpo para que no pases más frío en tu vida.

Creo que preguntó: ¿Me vais a dar una paliza?
– No, que te vamos a meter fuego y vas a quedar más doradito que un pollo en un asador.

Entonces, viéndoselas venir, respondió: Para ustedes la perra gorda, so hijos de…
– ¿Hijos de qué? –preguntó inquisitivo un cardenal que estaba en el jurado; porque aquello era como Operación Triunfo, pero todos los componentes con más mala leche que el Risto Mejide.
– Hijos de nuestra Santa Madre Iglesia. – Se apresuró a contestarles el condenado.

Pero antes de bajarse del estrado volvió a repetir.
– Para ustedes la “perra gorda”, pero que sepáis que la que se mueve es la Tierra.

Y es que por lo visto era bastante terco; porque nada más hay que mirar al cielo cualquier día para ver, como es el Sol el que se mueve.

¡Y es que la historia tiene cada cosa!

Fdo.: Un ignorante