
Al final del Medievo el uso del huevo de gallina se extendió por toda Europa como ingrediente de una alimentación modesta y cotidiana. Los españoles llevaron las gallinas a América y cuajó una de las mayores colonizaciones culinarias de la historia de la gastronomía.
Los antiguos persas, chinos y griegos consideraban a los huevos como símbolo de la creación. Los romanos los colocaban en las tumbas de sus muertos. Así mismo los indígenas de las islas del Pacífico. Como se calcula que en el mundo se consumen cada año 250 billones de huevos, no hay duda en calificarlos de alimento imprescindible.
2 comentarios:
Vaya tela lo que ha dado de si y de que hablar un simple huevo....
:P
Como siempre curioso e interesante...
Pues sí, así es la vida.
Saludos mismamentetu. ;)
Publicar un comentario