viernes, 23 de abril de 2010

EL CÓDIGO PENAL

Cada código penal responde a las inquietudes y prejuicios de un momento histórico, y el nuestro fue concebido en un periodo de candor ideológico que pretendía contrarrestar el abominable autoritarismo del franquismo. Para nuestros legisladores, el delincuente es un pobre hombre, una víctima de una situación económica injusta, un desgraciado que actúa por desesperación o por hambre o por extravío mental. En ningún caso se previó que el delincuente pudiera actuar por odio, por crueldad o por simple maldad. Según la mentalidad que ha inspirado nuestra legislación, todos los defectos humanos se pueden remediar por medio de la educación y el civismo. Y este principio general sólo se ha visto atenuado –y de forma muy parcial– en los casos de violación múltiple, terrorismo o violencia doméstica, y para ello han sido imprescindibles las quejas continuas de las víctimas, indignadas por la levedad de las penas y por la ingenuidad de la política de reinserción.

AUTOR: Eduardo Jordá

2 comentarios:

ANTONIO MORENO dijo...

Parece que para redactar este código penal se basaron en el título de una película: "To er mundo e güeno".
Y las excepciones las arreglan a base de “educación” y “psicología”.
El resultado es esta situación de indefensión y pisoteo de las victimas, los casos de flagrantes injusticias van creciendo paulatinamente, delinquir cuesta muy muy barato y la cantinela que escuchamos es la de siempre: no se puede legislar en caliente… cuentan con todo nuestro apoyo, pero… Palabras, palabras, palabras. Creo que ya me he preguntado esto en alguna ocasión: ¿a quien temen los políticos para no enderezar las cosas? ¿Qué votos temen perder? ¿Votaría la mayoría en contra de una reforma que evitara las injusticias que se están dando? ¿O es que los votos van por bloques de intereses y éste es un tema secundario? No lo entiendo; y de verdad, me gustaría que algún político me lo explicara.

Juan José dijo...

Creo que como dice el Juez de menores Emilio Calatayud, estamos perdiendo el Norte. También me hago esas preguntas de vez en cuando. Si encuentras las respuestas házmelas saber cuanto antes; dicen que cuando se comprenden las situaciones el alma se aquieta, y conseguimos vivir en paz con nosotros mismos.

Gracias por el comentario.